Casi rector (un candidato todo corazón)

Pocas veces en la vida tienes la certeza absoluta de que una persona aspira al puesto que realmente merece. Esta es una de ellas.

Escribo esto para haceros partícipes de la mezcla de sensaciones que tengo cuando me entero de que un amigo y compañero de cosas científicas de toda la vida, se presenta como candidato a rector en la Universidad de Cádiz. No puedo opinar de los otros aspirantes, -como científico describo lo que veo, no invento-, yo solo os quiero hablar de Casimiro Mantell.  

Peaso de candidato

Casi es una persona muy especial, por eso lo de la certeza absoluta. Lo conozco de compartir penas investigando juntos cuando éramos becarios en la uni. Os aseguro que ese territorio comanche saca lo mejor y lo peor de ti, y te permite conocer de verdad a las personas, como en pocas otras situaciones te permite la vida. Quizás en la antigua mili, o en esas jornadas de penurias o de guerras en las que el compañero que tienes al lado se convierte en algo más que familia, porque lucha a tu lado. Si no lo entendéis ya, no os esforcéis, no lo vais a entender nunca.

casi rector
Lo importante

Descubrí una persona con una pasión desmedida puesta en cada una de las cosas que hace. Y eso en un tipo tranquilo y grande, con ese puntito salado de ironía y de fino humor. Vamos, que eres de Cádiz se ve desde Ciudad Real. Fuiste el primero que me transmitió el amor -vamos, la locura-, por un universo desconocido para mí hasta entonces: el carnaval. Recuerdo las jornadas de laboratorio con las semifinales puestas en la radio a todo trapo (Antonio Martínez es una religión). Había que saber prestar atención a un giro de la música, a un detalle: eso es precisamente la ciencia. También me dijiste que hay veces que un quejío lleva semanas de ensayo, pero por eso hace que en el momento adecuado explote la carcajada o se te llenen los ojos de lágrimas: eso es la excelencia que tanto buscamos en la universidad.

Excelencia

Me enseñaste el mejor márquetin y filosofía de gestión con aquella noticia del periódico, en el que, para protestar del bache en la rotonda de acceso al campus, los vecinos habían hecho la fiesta de primer cumpleaños del socavón. Siempre andabas con tantas preocupaciones por hacer bien las cosas y por no tirar mal los residuos de los experimentos… Por todo eso ya sé cómo eres. Lo de los ocho años de gestión en el rectorado (4 de ellos de vicerrector), o en el departamento ya me parece lo de menos, aunque sea lo de más.

Ser osado, atreverse

No sé si será bueno para tu tranquilidad, pero para la universidad vas a ser un lujo. Porque conozco el percal de los locos soñadores, y ahora hacen falta a espuertas personas como tú. De los que curramos en lo que nos gusta, da igual que a veces se aprovechen de nosotros porque disfrutamos trabajando y no especulamos con las horas o los sentidos. Como dijo Lope, el amor es así, el que lo conoció lo sabe. Buena suerte amigo; o mejor dicho para los buenos: buen viaje. Tú sí nos escuchas.

Publicado por docgracia

Investigador, ciclista y escritor...

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